Te echo de menos. Ya lo hacía cuando estabas lejos, pero ahora estás cerca y te echo más de menos que cuando no te tenía a centímetros. Y lo peor de echarte de menos es que no he dejado de quererte, las mariposas aún siguen volando por mi cuerpo, y tú sigues siendo el culpable de éso.
Así que por favor, mírame.
No hay comentarios:
Publicar un comentario